Son hermosos edificios en los cuales al tope de su diseño los adornan agujas con dirección al cielo y éste edifico suele estar rodeado de serenos jardines, señalados en la tierra como lugares de adoración y serenidad para los miembros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días. Éstos templos Mormones son diferentes a las casas de reunión, adoración o capillas, debido a que, en los templos se llevan a cabo las ordenanzas más sagradas. Para los miembros de la Iglesia estos edificios son lugares para aprender más acerca del evangelio de Jesucristo, orar, hacer convenios o promesas, recibir respuesta a oraciones, bendiciones y prestar servicio.
En los templos aprendemos acerca del El Propósito de la Vida, de dónde venimos, nuestra relación con Dios, quienes somos y lo que Dios tiene preparado para nosotros, lo que realmente desea para nosotros y cómo podemos regresar a su presencia. Los templos nos enseñan que Jesucristo es el único camino para regresar a vivir a la presencia del Padre Celestial y nos enseñan acerca de las bendiciones de perseverar en ésta vida terrenal hasta el final. Los Templos son lugares que dan esperanza a los que a ellos asisten, son literalmente la casa del Señor.
Templos: Santos NO Secretos
Debido a que en los templos de los Santos de los Últimos Días se llevan a cabo las ordenanzas más sagradas y la reverencia debe prevalecer en dicho lugar, los templos no están abiertos al público una vez hayan sido dedicados al Señor. Anterior a dicha dedicación se lleva a cabo una casa abierta, en la cual Santos de los últimos Días y amigos de otras denominaciones religiosas son bienvenidos y recorren el edificio para conocer y así aprender acerca de las ordenanzas que allí se llevan a cabo ,incluso una vez dedicado no todos los miembros de la Iglesia pueden ingresar al templo sino después de tener una preparación personal, ya que ello les permitirá cumplir con los requisitos para entrar a dicho lugar y así ser dignos y preparados espiritualmente. Los Santos de lo Últimos Días no hablan de las ceremonias que se llevan a cabo dentro del templo y no se debe a que sean secretas sino que se consideran muy sagradas. Hay muchas razones para ésta discreción, pero se debe a que las cosas sagradas no se deben de tomar a la ligera o ridiculizarlas, por lo tanto , los Santos de los Últimos Días no permiten la exposición de las ordenanzas sagradas a las personas que no están dignas o preparadas para aceptarlas o que solamente quieran burlase de ellas.
Recomendación para asistir al Templo
Para entrar a un templo dedicado, un miembro Santo de los Últimos Días necesita una recomendación, lo cual es una tarjeta del tamaño de una tarjeta de presentación que ha sido firmada por tres personas para verificar la dignidad de la persona que la posee. Éstas tres personas son: el Obispo,el Presidente de Estaca y la tercera persona que firma la recomendación es la persona misma quien la solicita, el aspirante, indicando a todos que él o ella han sido honestos en la preparación que han llevado para poder ingresar a la casa del Señor. Los líderes que firman la recomendación deben de entrevistar al candidato para poder saber si ellos han llevado la preparación necesaria para estar dignos de entrar en la casa del Señor. Ellos hacen preguntas acerca de las creencias que la persona tiene, acerca de su Fe en Jesucristo, si creen en Él como su Salvador, entendimiento acerca del evangelio restaurado de Jesucristo, etc.
Algunas recomendaciones para ir al templo, como la de los jóvenes, son de uso limitado, lo que significa que dichas recomendaciones sólo pueden utilizarse para efectuar bautismos por los muertos. Éstas recomendaciones solamente necesitan la firma del obispo. Para la investidura y otras ceremonias, una recomendación de uso completo es necesaria. La primera recomendación que una persona recibe es para recibir su iniciatorias ( o la primera vez que va a el templo para recibir su investidura –protección).
Generalmente los Santos de los Últimos Días reciben sus investiduras cuando se preparan para ir a servir una misión de tiempo completo como Misioneros Mormones o justo antes de casarse. De otra manera ellos las reciben una vez estén preparados y dignos, por lo menos un año después de haber sido bautizados y confirmados miembros de en la iglesia SUD.
Para prepararse para entrar al templo por primera vez muchos Santos de los Últimos Días asisten a clases que les ayudan a entender más acerca de la experiencia única de entrar al templo por primera vez. Ellos aprenden acerca de la dignidad y son preparados espiritual y mentalmente para la experiencia simbólica del templo. Los obispos o en algunos casos, miembros de la iglesia, son llamados específicamente para enseñar dicha clase. Ésta preparación usualmente ayuda aquellos quienes están nerviosos o ansiosos respecto a la nueva experiencia de entrar al templo. Es normal que las personas que asisten por primera vez al templo sientan cierta ansiedad o puedan sentirse inquietos ya que a menudo experiencias nuevas nos causan cierto nerviosismo.
Ceremonias del Templo
Varias ceremonias de los Santos de los Últimos Días toman lugar en los templos, todas ellas contienen ordenanzas: oportunidades de hacer promesas a Dios y recibir promesa de bendiciones de Él por medio de la autoridad del El Sacerdocio. Dentro de otras ordenanzas hechas para los vivos están las iniciatorias, investidura, y los sellamientos o uniones eternas de las parejas en el Santo Matrimonio,Matrimonio en el Templo Mormón,y sellamientos de las familias.
Los Santos de lo Últimos Días también realizan la búsqueda de sus antepasados por medio de la Historia Familiar y por este medio conocen más de ellos y así poder realizar las ordenanzas salvadoras para ellos, ya que creen que las ordenanzas redentoras son necesarias y debido a que muchos de ellos han muerto sin recibirlas el Señor permite que esas ordenanzas se lleven a cabo en su Santa Casa. La creencia mormones es que existe La vida después de la muerte y que las relaciones familiares perdurarán eternamente, la misma sociabilidad que existe aquí en la tierra será posible tenerla allá al estar de vuelta en la presencia del Padre Celestial. Los muertos reciben dichas ordenanzas y todas las bendiciones de las ordenanzas efectuadas por los vivos en los templos. El bautismo, confirmación y la recepción del Espíritu Santo y las ordenanzas del sacerdocio que son usualmente efectuadas para los vivos en las casas de reunión (capillas o iglesias) se pueden realizar para los muertos solamente en el Santo Templo.